INICIACION A LA ESCRITURA AUTOMATICA





La escritura automática es uno de los tantos medios utilizados para lograr una apertura a la intuición sin que intervenga la mente.
En las canalizaciones desde Planos Superiores se debe tener cuidado con las interferencias mentales propias y de planos elementales. Por eso es necesaria una preparación previa.
En primer lugar escuchar la resonancia interna que nos lleva a creer que es posible. En segundo lugar el respeto exige no hacerlo solo por curiosidad, ELLOS son muy sabios y saben cuando hay real interés por aprender.
Buscar un lugar tranquilo donde no seamos interrumpidos. Tener siempre un sahumerio de Sándalo o Incienso encendido.
Sentarse en una postura cómoda con la columna recta. Hacer una relajación completa, respirar profundo y lento varias veces llevando la mirada a un punto en el centro de la frente sin forzar y con los ojos cerrados, imaginando que se abre un espacio en la parte superior de la cabeza.
Tener un cuaderno exclusivamente nuestro y para este trabajo, tomar un lápiz (no lapiceras de tinta).
Escribir una nota explicando, en pocas palabras, nuestro interés en hacer contacto con ellos. Luego sostener el lápiz entre el dedo índice y medio en el dorso de la mano, apoyarlo suavemente sobre el papel y esperar con tranquilidad.
Al principio es probable que no ocurra nada, entonces pasados uno o dos minutos, guardar todo y continuar, si es posible, 7 días después a la misma hora.
Seguramente comenzaremos a notar que se producen trazos in entendibles. Esto es señal de que vamos bien.
Repitiendo con paciencia este trabajo cada 7 días se irá logrando descifrar lo que aparece.
En algunos casos ocurre rápidamente, en otros lleva más tiempo pero como la voluntad es hija del entusiasmo, todo se logra.

DETRAS DE LA NOCHE






Sobrepasó todo intento de razonamiento…
En el medio de aquella noche, justo al centro de la nada me detuve, el silencio me aturdía tapando mis oídos pero dentro de mí sonaban instrumentos desconocidos.
Miré al cielo y vi otro cielo, vi ¡El Cielo! El real, no el de la figura mental.
Las estrellas me mostraron un lugar desde donde descubrí un espacio muy brillante y se manifestó un portal dorado que se abrió lentamente y supe que era mi momento.
Los temores desaparecieron, la alegría se transformo en rayos llenos de campanas y me dejé llevar en un viaje a la muerte.
En esta muerte encontré la vida y soy. Soy la flor, el pájaro, la montaña el fango, la tormenta la serpiente y la oveja.
Ah… y también soy vos y soy yo.

LA LLAMA DE LA LIBERTAD





BRUJAS Y ESTRELLAS


LA LLAMA DE LA LIBERTAD




Cada vez que encendía el fuego de la cocina, sentía un temblor en todo el cuerpo y en sus oídos sonaba un raro chasquido.
Si veía quemarse una montaña, lloraba desconsolada.
Jamás pudo soportar los fuegos artificiales.
Los hogares encendidos la ponían nerviosa.
Una noche, mientras observaba la llama de una vela, en la oscuridad circundante vio un grupo de mujeres que realizaban una danza circular y en el centro distinguió la figura de una joven que le resultaba misteriosamente conocida.
El cuadro era sublime hasta que aparecieron unas siluetas oscuras que tomaron a la muchacha y la llevaron al centro de una plataforma en tinieblas. Comenzó a sofocarse, el ardor lo sintió sólo en las piernas después veía desde lo alto, su cuerpo entre las llamas.
Un golpe de viento entró por la ventana y apagó la vela.
Nunca más volvió a sentir temor ante el fuego.

TRIANGULO DE ROSAS



Sus pies descalzos se hundían en la arena roja, así la pintó la tarde y así también se veía su rostro con los ojos clavados en el horizonte.
Sintió el abandono del atardecer y lo invadió una soledad de brumas.
Caminó toda la noche anotando las estrellas en un mapa de lágrimas.
Al llegar a las rocas encontró un rincón donde brotaban cascabeles, ese era el sonido de la vertiente.
Miró a través de la enramada y vio un triangulo tallado sobre una piedra plana, formado por tres rosas y en el centro resplandecía una luz de donde se reflejaban todas las facetas del color, para disolverse en la profunda negrura del cielo.